Navegar es un placer que todo el mundo debería experimentar. No pasear en barca por un estanque remo en mano, subir a un barco o un velero y navegar por la costa o el mar. Disfrutar de esa brisa y el horizonte despejado, sin nada alrededor. Esa paz y esa calma absoluta que invita a meditar. Todos sabemos que la navegación no es para todo el mundo, es un lujo al alcance de algunos. Aunque siempre existe la opción de disfrutar de paseos en yate, barco o lancha, gracias a los clubes náuticos que ofrecen servicios recreativos accesibles a todo el mundo.
También existe la alternativa de ser un lobo de mar y convertirte en patrón de barco. Del mismo modo que existe la formación para convertirse en piloto, uno puede convertirse en capitán de barco. Aunque como todo en esta vida, debe hacerse según las normas y siguiendo los pasos establecidos. En primer lugar, hay que tener claro que se quiere se lobo de mar y buscar una escuela náutica como Avante Centro de Estudios y Actividades Náuticas, donde aprender todo lo necesario para convertirte en un auténtico marinero con aspiración a capitán.
En España, el carné de patrón de barco se denomina como Titulación Náutica y se encuentra regulada por el Real Decreto de Titulaciones Náuticas de recreo. Todos los cursos de patrón de barco existentes, pueden realizarse en las diferentes escuelas náuticas como la citada anteriormente. En su mayoría pueden realizarse de forma online o presencial, siempre teniendo en cuenta que tras realizar los cursos teóricos, será necesario completar la información con unas prácticas oficiales de navegación, seguridad y radio.
Son cinco las titulaciones náuticas de recreo que se pueden obtener con sus correspondientes cursos de preparación. Todas ellas cuentan con una parte teórica y otra práctica que deben superarse para poder obtener la acreditación oficial. A saber, son las siguientes: Licencia de navegación o Titulín; Patrón para navegación básica o PNB; Patrón para embarcaciones de recreo o PER; Patrón de yate o PY; y Capitán de yate o CY.
Una vez completada la formación que capacita para obtener la categoría máxima como Capitán de yate, existe la posibilidad de realizar un curso complementario como Patrón Profesional de Embarcaciones de Recreo o PPER. Esta titulación permite trabajar como capitán en yates y realizar chárter.
Cada titulación un grado
Como puede suceder en una carrera militar, o cualquier carrera a decir verdad, cada curso es un grado superior al anterior. Es decir, hay que empezar por la primera para ir avanzando en conocimiento, experiencia y categoría.
Por lo tanto, si quieres convertirte en patrón de barco, lo primero que debes hacer es iniciar tu formación para obtener el Titulín o licencia de navegación. Esta titulación permite a los que la poseen ser patrones de barcos de hasta seis metros de eslora, y pueden navegar hasta cuatro kilómetros de distancia desde el puerto. Se pueden llevar todo tipo de motos acuáticas sin limitación de potencia pero únicamente durante el día.
Una vez superado el curso para la licencia de navegación y obtenido el Titulín, puedes pasar al siguiente nivel y prepararte para obtener el título de Patrón de Navegación Básica. Esta titulación capacita para ser patrón de barcos de mayor longitud, hasta ocho metros de eslora. Permite navegar una distancia de hasta diez kilómetros de distancia desde el puerto. Igualmente es posible llevar todas las motos de agua, e incluso navegar a vela. Importante el hecho de que permite la navegación de día y de noche.
Hasta aquí las titulaciones más básicas. Ahora puedes pasar a obtener la titulación de patrón de barco más conocida, el PER o Patrón de embarcaciones de recreo. La titulación más habitual, permite llevar barcos de hasta quince metros de eslora y navegar a doce millas desde la costa. Es decir más de veintidós kilómetros, sin necesidad de que haya puertos cerca, se puede costear y navegar entre las islas Canarias y Baleares. Como es lógico se pueden llevar motos náuticas sin límite de potencia y navegar con barcos de vela. La capacitación permite navegar de día y de noche.
Aún hay más. El PER se puede ampliar con tan solo la realización de unas prácticas de navegación con lo que se pueden llevar barcos de hasta veinticuatro metros de eslora y navegar entre la península y las Islas Baleares.
Si obtenido el PER, se te queda corto y quieres avanzar, puedes seguir avanzando en las categorías náuticas y convertirte en Patrón de yate. Esta titulación capacita de forma notable y permite la navegación con barcos a partir de veinticuatro metros de eslora alcanzando las ciento cincuenta millas. En la práctica supone una navegación por todo el mar Mediterráneo y llegar hasta las Islas Canarias. Por supuesto, las motos náuticas y la navegación a vela se incluyen en la titulación.
Por último, la mayor titulación que se puede alcanzar en lo que a títulos náuticos de recreo respecta, es al de Capitán de yate. Esta titulación no tiene limitación de eslora, permite llevar cualquier barco de recreo y navegar por todo el mundo, sin limitación de distancia. A todas estas atribuciones se añaden las ya citadas, motos acuáticas y navegación a vela, así como la navegación diurna y nocturna.
A distancia o presencial
La formación para obtener cualquiera de las titulaciones, puede recibirse de dos maneras, a distancia y presencial, salvo para la obtención del Titulín que únicamente, puede realizarse de manera presencial.
Gracias a internet y los materiales pedagógicos que ofrecen los centros de enseñanza náutica, el PNB, el PER y el PY, pueden obtenerse de forma online. Aunque esta modalidad supone una serie de ventajas con sus correspondientes inconvenientes. Entre las ventajas, se encuentra la posibilidad de estudiar en cualquier momento, sin horarios. No se depende del calendario ni el reloj para seguir la formación. Está pensada para las personas que por la razón que sea, no pueden asistir a la escuela de navegación. Para la modalidad de cursos de patrón de barco a distancia, es fundamental tener conocimientos básicos de internet, disponer de ordenador y una buena conexión a la red. En contra, existe el riesgo de no ser lo suficientemente disciplinado para estudiar y preparar el examen que hay que pasar para obtener la titulación. Además de carecer de un profesor que siempre aportará más información que la que viene en los libros y manuales.
Lo más lógico debido a las características de este tipo de formación, es hacerlo de manera presencial con todos los beneficios que aporta. Aun así, la opción de realizar la formación a distancia es la ideal para los que carecen de tiempo para acudir a las clases en horarios concretos.
En cuanto a los cursos, podemos decir que el Titulín se obtiene tras realizar un curso de seis horas, en dos bloques: dos horas teóricas y cuatro prácticas. Durante la formación se adquieren conocimientos básicos sobre nomenclatura náutica, maniobras esenciales, seguridad en el mar, comunicaciones marítimas, reglamento de navegación y marcas. Las prácticas se basan en las maniobras básicas de seguridad como el atraque, aproximación a la boya, ciaboga, hombre al agua y navegación.
El curso de PNB se realiza en seis clases de dos horas y media y capacita al estudiante con conocimientos como la nomenclatura náutica, los elementos de amarre y fondeo; el reglamento internacional para prevenir abordajes; balizamiento marítimo, seguridad; y legislación. Se aconseja realizar las prácticas de navegación y radio antes del examen. Las prácticas duran ocho horas y se realizan en una sola jornada.
Llegamos al que se considera como curso de patrón de barco más completo: el PER. Se divide en tres bloques: teoría, prácticas de navegación y prácticas de radio. En este curso de capacitación para obtener el título de patrón de embarcaciones de recreo se estudian aspectos importantes de la náutica:
- Nomenclatura náutica.
- Elementos de amarre y fondeo.
- Maniobras y navegación.
- Teoría de la navegación.
- Carta de navegación.
- Reglamento internacional para prevenir abordajes en la mar.
- Balizamiento marítimo.
- Meteorología.
- Seguridad en la mar.
- Emergencias en la mar.
- Legislación.
Como se puede observar, comparte temario con el PNB, lo que hace que sean convalidables entre sí. La parte teórica del PER cuenta con la peculiaridad de aprender navegación costera en carta, lo que hace que su formación presencial sea la más recomendable. Se completa con unas prácticas de seguridad y navegación de dieciséis horas y es obligatorio completar la formación con un curso de radio de operador de corto alcance.
Para la obtención de los títulos superiores, la formación es eminentemente práctica, pues se entiende que con el PER, ya se poseen los conocimientos necesarios para navegar, aunque se amplían algunos conocimientos. Si no se superan los cursos anteriores y se obtienen las titulaciones previas, no es posible avanzar para convertirse en Patrón de yate y Capitán de yate respectivamente.
En resumen, convertirse en capitán de barco y echarse a la mar puede resultar sencillo y divertido a la vez. Por mucho que los cursos de capacitación y los exámenes puedan parecer complicados, la escalabilidad desde el Titulín hasta el rango de Capitán, facilita el aprendizaje y la adquisición de conocimientos necesarios para navegar.